4 consejos para disfrutar del esquí, pero sobre todo del après-ski en 2025

Por Elena Muñoz

Viajando descubre quién es y quién quiere ser. Una periodista de alma digital que le encanta contar lo que ve y cómo le hace sentir cada destino. Le apasionan las historias entre maletas y hablar con todo el que pueda.

Para los amantes del esquí, hay un momento clave que no queremos perdernos: ¡El après-ski! La ocasión de relajarse y disfrutar junto a los tuyos tras un día lleno de adrenalina y esfuerzo. Por eso, hoy queremos ayudarte a planificar un viaje de esquí que aúne a la perfección este deporte de invierno con actividades de lo más entretenidas ¿Te apuntas?

Porque los viajes de esquí también se convierten en una forma ideal de desconectar, ya que combinan deporte, naturaleza y ocio. Y es que, una vez te hayas quedado satisfecho bajando y subiendo la montaña… ¡queda lo mejor! El après-ski. Todo un arte, en el que el amplio abanico de opciones que tienes nunca tendrá fin. Desde relajarse en un spa o ir a un restaurante a probar delicias de la zona, hasta tomar una copa de vino junto a la chimenea, asistir a una fiesta al aire libre una vez se cierran pistas o incluso a tirarse en trineo por la noche. Planes infinitos que, con amigos, familia o en pareja, sin duda, harán que tu viaje de esquí sea un viaje diferente. Descubre con nosotros algunos de los mejores lugares de España para esquiar incluyendo el maravilloso mundo del après-ski, auténticas experiencias que elevarán, sin lugar a dudas, tu viaje en la nieve.

1. Elige una estación de esquí en función de tus gustos, nivel y propósito

Es verdad, que podríamos hacerte un ranking de las mejores estaciones de esquí españolas, pero como te hemos dicho antes, queremos contarte 4 consejos que debes tener en cuenta para disfrutar como nunca de este deporte. Así que comenzamos con el primero de todos: No te lances a escoger la primera pista de esquí que se te ocurra por la cabeza.

Es importante que valores cuál es tu nivel, con quién vas a realizar tu viaje de esquí y por supuesto cuál será el plan que te apetecerá hacer. Sabiendo esto, te será mucho más fácil acertar en tu decisión.

Por ejemplo, para quienes se inician en el esquí, estaciones como La Molina-Masella y Vall de Núria (Girona) o Valdelinares (Teruel) se convierten en lugares ideales para este tipo de esquiadores, ya que ofrecen pistas verdes y azules geniales para aprender, con áreas especializadas y un ambiente mucho más relajado. Si ya posees un nivel intermedio, estaciones como Formigal (Huesca) o Sierra Nevada (Granada) combinan pistas variadas con retos moderados y paisajes impresionantes. Y si eres un experto o un esquiador de nivel avanzado, podrás encontrar desafíos técnicos en Baqueira Beret y Boí Taüll (Lleida) o Astún-Candanchú (Huesca), que cuentan con pistas negras, snowparks y opciones de esquí fuera de pista.

El tipo de viaje también influye en la elección de la estación. Para familias, La Molina-Masella o Valdezcaray (La Rioja) ofrecen actividades adaptadas para niños y un ambiente acogedor. Si se trata de un viaje romántico, Espot Esquí (Lleida) o Boí Taüll son estaciones mágicas que respiran exclusividad y tranquilidad. Si vas con amigos, estaciones como Formigal o Baqueira Beret te ofrecerán un ambiente animado, eventos con música en directo y opciones de après-ski, perfectas para disfrutar tanto dentro como fuera de pistas. Y si, por el contrario, tu premisa es tener un clima soleado y relax, Sierra Nevada combinará las bellas vistas de la montaña con servicios exclusivos como spas y terrazas chill-out que podrás encontrar en Meliá Sol y Nieve o en Meliá Sierra Nevada. ¡Una pasada!

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2. Comienza por los primeros pasos: equipamiento y alquiler

Nuestro segundo consejo, del que vamos a hablarte para que puedas aprovechar al máximo tu viaje de esquí, es: Haz hoy lo que puedas evitarte mañana.

Hay muchos aspectos que debes tener en cuenta a la hora de organizar un viaje a la nieve, por lo que todo lo que puedas llevar previamente comprado o reservado te ayudará a evitar colas innecesarias, estar preparado para imprevistos y, además, ahorrarte un poco de dinero.

Comienza por tener claro el equipamiento que necesitas: abrigo, pantalones, mayas y camisetas térmicas, forro polar, gorro, guantes, gafas de esquí… ¡Lo importante es ir como una cebolla! Ya que, como cada uno tiene una temperatura corporal, podrás irte quitando capas en función del frío o del calor que tengas a lo largo del día.

Luego viene el material técnico con el que realizaremos nuestro deporte: botas, casco, esquís o tabla, bastones… Para mí, sin duda, la opción de reservar será la mejor alternativa para esquiadores principiantes o que vayan ocasionalmente a la nieve. Podrás hacerlo en la misma estación de esquí o en tiendas de alquiler de las ciudades o pueblos de alrededor. A veces hay packs completos que te ayudan a ahorrar un poco. Y si ya eres un esquiador asiduo y lo haces varias veces al año, mi recomendación sería que te compraras unas botas, ya que son la clave para esquiar mucho más cómodo y seguro.

Por último, queda comprar el Forfait, es decir, tu pase diario a la estación de esquí y la tarjeta que te permitirá moverte por las distintas pistas utilizando sus remontes. Hazte con él lo antes posible para evitarte colas innecesarias el primer día que comiences a esquiar. ¡Es más! Ya hay estaciones que te permiten comprar el forfait de manera online en sus páginas.

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3. Encuentra tu mejor “look après-ski”: Cómodo, cool y sostenible

¿Te apetece pasar de las pistas a una cerveza sin cambiar de outfit? Hazlo, pero: Ve vestido para todo tipo de ocasión combinando moda, comodidad y función.

Hay veces que te dará tiempo a parar por el hotel para darte una ducha y cambiarte de ropa, pero, otras muchas, los planes de après-ski pueden surgir justo al salir de pistas. Por eso, te recomendamos ir preparado con ropa multifuncional y versátil, y así estar listo para todas las actividades après-ski que puedan surgir.

Es verdad que, en las estaciones, podrás encontrarte desde looks casuales hasta las últimas tendencias de moda en ropa de nieve. ¡Vamos! una auténtica pasarela de moda en toda regla. Por eso, cuando escojas un outfit para esquiar, nuestra recomendación es que sea ropa cómoda, pero con un toque cool. Puedes apostar por prendas atemporales que puedas usar fuera del ambiente après-ski.

Elige también ropa que abrigue bien por si estás al aire libre. Un jersey oversize o de punto grueso elaborado en lana merino, algodón orgánico o mezclas recicladas, pantalones térmicos o joggers, ajustados o más anchos… ¡Hay una amplia gama de prendas! Incluye a tu outfit una prenda ligera y cómoda como una chaqueta o un forro polar, por si te quitas el abrigo. Además, las botas après-ski, impermeables y forradas con lana o materiales veganos y con suelas antideslizantes, serán un must para moverte por la nieve o superficies resbaladizas.

No te olvides de otros accesorios clave como unos calcetines gruesos de lana ¡súper calentitos!, gorro de punto, una bufanda o braga térmica y unos guantes, perfectos para mantener las manos calientes mientras socializas al aire libre. Por último, añade el toque glamuroso y funcional, unas gafas de sol estilo retro con lentes polarizadas. ¡Ah! échate protector solar y bálsamo labial, ya que incluso con frío, el sol puede ser intenso en la montaña.

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4. Apúntate a todas las actividades après-ski que más te gusten

¡Ya tenemos todo preparado! Toca relajarnos en un lounge, disfrutar de una bebida caliente o bailar en el après-ski con mucho estilo. Así que, nuestro último consejo será: Si quieres aprovechar, escoge cada día un plan.

Cuando hablamos de après-ski realmente hacemos referencia a todas las actividades, populares o no, que podemos hacer después de un día en la montaña. Experiencias post-esquí que te darán la oportunidad de descansar, dejarte llevar o socializar.

¡Los planes son inagotables! Irte de compras, tomar unos cócteles, acceder a un spa en la montaña, hacer una cata de vinos... Nosotros te proponemos a continuación algunas actividades après-ski que puedes hacer:

Disfruta de bebidas calientes, un vino local o deliciosos cócteles en algunos de los bares que encontrarás tanto en pistas como en las estaciones de esquí. Desde terrazas soleadas a locales acogedores y con mucho encanto, podrás deleitar tu paladar y la vista con el paisaje espectacular.
¡Date un capricho! Y reserva en un restaurante que ofrezca una propuesta gastronómica tradicional o gourmet. Restaurantes como El Lodge en Sierra Nevada o Casa Irene en Baqueira Beret destacan por ofrecer platos elaborados con productos locales y técnicas modernas.
Entérate si durante tu viaje de esquí, organizan fiestas en la nieve con música en directo, DJs internacionales y temáticas de lo más divertidas. Por ejemplo, Formigal es conocida por sus animadas fiestas après-ski, mientras que estaciones como Baqueira Beret ofrecen noches más exclusivas con música y luces en plena montaña.
Elige una tarde de spa inmerso en la montaña para relajarte como nunca. Con piscinas climatizadas al aire libre, jacuzzis y tratamientos de lujo, ofrecen un contraste único entre el calor del agua y el frío del entorno. Nuestros hoteles de nieve con spa en los Pirineos como Hotel Vielha Val d'Arán Affiliated by Meliá o en Granada como Meliá Sol y Nieve y en Meliá Sierra Nevada, podrás encontrar esta maravillosa opción.
Para los más pequeños, las estaciones de esquí ofrecen también actividades après-ski para disfrutar en familia. Podrás patinar sobre hielo, realizar descensos en trineo o ir a zonas específicas para jugar en la nieve. ¡Muy divertido!
¡La montaña tiene mucho que ofrecer! Por lo que, además del esquí tradicional, puedes explorar otras opciones como paseos en raquetas, esquí de travesía con pieles de foca, tubing, snowboard o trekking.
Para quienes buscan bienestar en la montaña, muchas estaciones han integrado actividades après-ski más tranquilas como yoga al aire libre con vistas nevadas o salas de lo más acogedoras con chimeneas para disfrutar de un buen libro o una taza de chocolate caliente.
Las noches en la montaña son perfectas para compartir momentos con amigos o familiares, y los juegos de mesa, la opción ideal. Es el momento de tirar de clásicos como el ajedrez, juegos de cartas o Scrabble, o juegos de mesas más modernos como Carcassonne, Ciudadelas o Catán.
Por último, apúntate a una sesión de turismo de nieve, ya que siempre es buen momento para descubrir nuevos destinos y lugares ocultos, por lo que dar un paseo para conocer el entorno natural y cultural es todo un acierto. Visita pueblos cercanos o explora parques naturales cubiertos de nieve.

Como ves, si te organizas bien, no habrá ni un solo día que puedas aburrirte, ya que los viajes de esquí se convierten en uno de los viajes más completos y únicos que puedes hacer al año. ¡Ahora es tu turno! Encuentra tu destino après-ski y decide todo lo que te gustaría hacer durante tu viaje a la nieve.