Una escapada romántica a París por San Valentín

Siempre será una buena ocasión si os acercáis a la orilla del Sena y celebráis San Valentín a bordo de uno de los Bateaux parisinos. Tu pareja y tú tenéis la opción de acudir de día y disfrutar de una visión diferente de la ciudad desde esta perspectiva, incluso ver el atardecer. Pero también existe la opción de reservar una cena especial de San Valentín sobre las aguas del río viendo París iluminada y acompañados de la mejor banda sonora para festejar vuestro momento. Si bien todos conocemos esta romántica experiencia es porque sigue siendo una de las preferidas de cualquier pareja enamorada de viaje en esta ciudad y que no puede faltar en el día más apasionado del año.

La ciudad parisina es una gran coleccionista de lugares inolvidables para vivir la mejor escapada romántica en San Valentín. La Torre Eiffel, el puente de las Artes y Montmartre son algunos de los más conocidos e idóneos para esta fecha del calendario.

La primera opción que os damos es contratar una sesión de fotos alrededor de la Torre Eiffel. Es un recuerdo inolvidable de vuestro paso por la ciudad del amor. Al terminar, podéis aprovechar para disfrutar de un romántico picnic en los jardines del Campo de Marte si hace buen día. Tendréis la cita perfecta en pleno corazón de París y acumularéis momentos especiales.

Otra buena elección para estas fechas podría ser subir al mirador del Arco del Triunfo. Impresionante perspectiva si el cielo está despejado de la colosal ciudad. Ofrece una vista panorámica de 360° y se recomienda subir a primeras horas de la mañana. Contemplar un atardecer después de haber estado de compras por los Campos Elíseos puede ser la guinda del pastel para una jornada llena de amor sin límites el día de los enamorados.

Si de paseos hablamos, los jardines parisinos son el lugar perfecto y con más encanto para lucir vuestro romance. El Jardín de Luxemburgo tiene un elegante diseño y un precioso estanque rodeado de flores, esculturas y fuentes, además de unas icónicas sillas de metal donde las parejas se sientan a conversar. Igualmente, son encantadores los Jardines de las Tullerías, junto al Louvre y la Plaza de la Concordia. Una combinación perfecta de historia y belleza.

Los pasajes cubiertos de París tienen un aire romántico innegable. Son vías en medio de edificios rodeados de establecimientos, pero con un toque único. Uno de los más famosos es el Passage des Panoramas, inaugurado en 1871. Fue el primero en tener farolas de gas y aún hoy mantiene un aire vintage, con tiendas de coleccionistas y cafés singulares. Caminar por ahí cogidos de la mano es lo más romántico y original que podéis hacer durante vuestra escapada en San Valentín. El Passage des Panoramas se encuentra en 11 boulevard Montmartre. Podréis llegar en metro fácilmente bajando en la estación Grands Boulevards (líneas 8 y 9).

Los puentes que recorren el Sena dentro de la capital del amor son un escenario perfecto para cualquier pareja de enamorados. Tomar una instantánea desde el famoso Puente de las Artes puede ser uno de los momentos más especiales del día. Un puente peatonal que une el Instituto de Francia con el patio del Louvre. En él pesa la tradición de los candados, donde las parejas depositaban uno y se juraban amor eterno. Actualmente ya no está permitido, pero sigue siendo un símbolo de amor en París, imprescindible para pasear un 14 de febrero.

Si sois amantes del buen vino podéis probar una experiencia en pareja para el día de los enamorados. En la capital francesa encontrarás muchas opciones, pero aquí os proponemos descubrir Les Caves du Louvre, una mansión privada de André Eynaud. Este caballero fue un prestigioso comerciante en la corte del rey Luis XV. Si decidís acudir a una cata de vinos en este espacio, os ofrecerán una visita guiada a la bodega, probaréis una selección de vinos única y conoceréis la elaboración de este producto desde el inicio. Es el plan perfecto para una escapada romántica a la capital francesa.

Ahora mismo es un privilegio volver a disfrutar de uno de los símbolos más icónicos: la catedral de Notre Dame. La Gran Dama parisina sufrió un incendio en 2019 donde las llamas devastaron la cubierta de la catedral y en el interior, el crucero del templo se llevó la peor parte. Pero cinco años después, en diciembre de 2024, se ha conseguido terminar su reconstrucción. Volver a ver su grandiosidad y sus impresionantes vidrieras, el inmenso interior y saludar a sus famosas gárgolas en las torres, es un plan en pareja que simboliza la fuerza y la consistencia del amor.

Cuando pensabas que ya habías visto todos los planes románticos que se pueden hacer en la capital francesa, aún podemos tener uno mejor. Tras sobrevolar París en un helicóptero, éste aterrizará en el Chateau de los Marqueses de Vibraye. Podréis dar un precioso paseo por los jardines, admirar la impresionante y delicada colección de tapices y el mobiliario histórico que aún se conserva en el castillo. La excursión termina con una cena de lujo en el comedor del Chateu. Un plan romántico y original que no todo el mundo puede permitirse, pero que le dará una connotación distinguida al fin de semana parisino. Aquí tendréis más información acerca de la experiencia.

Si paséais con los últimos rayos de sol de la tarde por el increíble barrio de Montmartre, veréis la ciudad parisina atardeciendo con una luz espectacular. Un plan romántico y sencillo es sentaros en la escalinata que baja desde el Sagrado Corazón y desde ahí admirar las vistas impresionantes de París: un recuerdo único.

Por la noche la ciudad del amor se transforma en un espacio mágico. Los planes como este en la capital francesa son lo que estabais buscando para disfrutar de vuestro romance durante el 14 de febrero. 

Puedes continuar paseando por el barrio de Montmartre y reservar una velada para dos en uno de los restaurantes legendarios de la Plaza de la Tierra. Cena romántica de San Valentín con una cocina francesa que deja sin palabras y que se disfruta con un buen vino acompañado de música de fondo. Au Cadete de Gascoone es uno de ellos.

Cerca de Montmartre, en dirección al Barrio Rojo, también podéis encontrar restaurantes emblemáticos para una cena en pareja. Cocina irresistible con productos típicos franceses, que dejan sin palabras a cualquiera. Locales como Madre Catherine os recibirán con velas y mantel rojo o blanco y platos sencillos pero deliciosos. La noche solo acaba de comenzar y podéis continuar con vuestro plan romántico en la ciudad del amor.

Después de cenar os proponemos que os acerquéis al Moulin Rouge  y disfrutéis de un cabaret. Los espectáculos del teatro pueden trasladarte a la época de vestidos de cancán y labios rojos que inundaban el barrio. Podéis comprar la entrada solo para el espectáculo o reservar también una deliciosa cena para dos. Sin duda, una experiencia ideal para celebrar San Valentín y para acabar bien el día.

Es importante que, a la hora hacer un viaje romántico en pareja, elijáis un buen alojamiento. Por eso os recomiendo que siendo París el destino fijado, reservéis una estancia en el Hotel Villa Marquis Meliá Collection. Este es un hotel boutique ideal para la ocasión, con un diseño vanguardista y elegante establecido en una antigua residencia de la dinastía Hurault Vibrabe. Sentid el poder de la aristocracia y su buen gusto alojándoos en esta preciosidad de hotel en París por San Valentín. Está ubicado entre el Sena y los Campos Elíseos, en pleno corazón de la capital francesa, una situación privilegiada. Y, aunque la sola estancia ya es una vivencia increíble, también debéis conocer el resto de las experiencias que os esperan fuera del hotel por San Valentín en París.

Algunas de las experiencias que habéis visto en el post, podéis encontrarlas en este hotel y en Maison Colbert Meliá Collection.